Lugares con encanto e historia en Cáceres

Si queremos conocer en Cáceres un lugar con leyenda y encanto no podemos irnos sin visitar la Casa del Mono, palacio de finales del siglo XV, considerado el lugar más mágico de la ciudad, llamado así por la escultura de un mono encadenado que remata el pasamanos de la escalera principal interior. También llaman la atención las gárgolas que se encuentran en su fachada. Existen varias leyendas sobre este mono protagonista del lugar, la más popular y oficial dice que en el lugar vivían un rico comerciante y una bella joven, esta se moría de aburrimiento porque los hijos no venían, así que su marido le trajo un mono de sus viajes a tierras lejanas. La mujer le convirtió en el centro de sus mimos y cariños hasta que inesperadamente tuvo un bebé, que ya no esperaban. Ante esta situación el mono se volvió loco de celos y mato al niño tirándolo por la ventana. Desde entonces el mono fue encadenado a la escalera y así ha llegado hasta nuestros días.

Dignas de visita son las cuevas prehistóricas de Santa Ana, el Conejar y Maltravieso. Esta última no se puede visitar pero existe un Centro de Interpretación donde se encuentra una recreación de la misma, muy cerca de la cueva. En ella están representadas las manos blancas de cuatro dedos que se encuentran en más cuevas prehistóricas de todo el mundo para las que los investigadores no encuentran explicación.Santuario de la Virgen de la montaña en Cáceres

Podemos visitar, también, Cáceres el Viejo, campamento romano que albergó, al menos, dos legiones en la antigüedad. Posee murallas de pizarra y barro, con doble foso y cuatro puertas.

En la cima de la sierra de Portanchito se encuentra la principal Ermita de Cáceres, llamada Ermita de la Montaña, en ella se encuentra la imagen de la Virgen de la Montaña, patrona de Cáceres. Desde allí se pueden admirar las vistas de toda la ciudad. Este lugar fue construido gracias al tesón de un eremita que llegó a la ciudad en el 1600 y que pidió y pidió limosna hasta conseguir levantar este santuario que hoy conocemos.