Historia de Alicante

Existen restos arqueológicos recogidos en La Cova del Fum, en Fontcalent, que datan del III milenio a.c. que nos hablan de la presencia humana en estos territorios. Se sabe, también, que en el Siglo IV a.c. se funda la ciudad Ibérica de Tossal de Manises. Es en el año 201 a,c, cuando los romanos capturan Tossal conquistando estas tierras y concediéndolas el status jurídico de municipio de Roma, será conocida por Lucentum. Será aquí y más tarde en la falda del monte Benacantil, debido a las malas condiciones que empieza a tener el terreno que se vuelve cenagoso, donde irá creciendo la actual Alicante.

Posteriormente llega el dominio islámico que se instala desde el Siglo VIII hasta el Siglo XIII poniendo el nombre de Al Laqant a este territorio. Durante este tiempo, sobre el Siglo IX, se construye el Castillo de Santa Bárbara, alrededor del que se va conformando y creciendo la ciudad, su proximidad al mar y su altitud hacen de este lugar un sitio más seguro. Sin embargo, en el año 1246 Alfonso X El Sabio conquista la ciudad para la corona de Castilla, y en el año 1296 es conquistada para la corona de Aragón.

En 1490, Fernando El Católico otorga a Alicante el titulo de ciudad. A partir de aquí la ciudad despega, comienza a florecer, es importante el avance económico que tiene gracias al comercio marítimo cada vez más activo, su puerto se convirtió a principios del Siglo XVI en el puerto más importante del reino de Valencia. Tras esto, Alicante sufre el protagonismo de muchos conflictos bélicos, no hay que olvidar su situación estratégica, los ataques siempre llegan por mar.

Tras siglos de avatares poco a poco llegan los cambios, Alicante se decanta por una actividad más industrial que agrícola y en el Siglo XIX con la llegada del ferrocarril en conjunción con su actividad portuaria, Alicante despega y llegan tiempos de bonanza. Hoy encontramos una ciudad que se ha convertido en la segunda más importante de la Comunidad Valenciana, y, la undécima en importancia en España. Se ha convertido en referente turístico digno de ser visitado y conocido.

Son muchas las gentes que visitan este lugar, en Alicante conviven muchas culturas, no hay que olvidar que uno de los motivos por los que crece tan vertiginosamente es la llegada a sus tierras de inmigrantes, buscando nuevas posibilidades. Sin embargo esta ciudad mantiene sus tradiciones y costumbres a lo largo de los años, podemos disfrutar de sus Hogueras de San Juan, declaradas Fiestas de Interés Turístico Internacional.

Se celebran en Junio, consisten en quemar todo lo inservible en la noche de la “cremá” junto con el agua que reparten los bomberos, la “banya”( bañada). Podemos disfrutar de su fiesta de “Moros y Cristianos” importante escenificación de la reconquista de la ciudad a los árabes. O unirnos a la romería de Santa Faz que recorre 8 Km y que data del Siglo XV. Es una placer visitar Alicante en Semana Santa con sus más de 30 cofradías o si preferimos lo contrario hacerlo en Carnavales, hay para todos los gustos.